El suelo pélvico es el conjunto de músculos y ligamentos que rodean la cavidad abdominal en su parte inferior. Sostienen todos los órganos pélvicos (vejiga y uretra, útero y vagina; y recto) y aseguran su normal funcionamiento. El suelo pélvico es algo dinámico, se adapta a nuestro movimiento pero siempre manteniendo una adecuada tensión que sujete los órganos dentro de la pelvis. Cuando el suelo pélvico se debilita, surgen problemas que pueden afectar al funcionamiento de los órganos pélvicos.

1. En primer lugar, se realizan una serie de preguntas tanto de carácter uroginecológico y obstétrico, como de afectación emocional y condición física actual.
2. A continuación, se confirma la hipótesis planteada en la primera parte de la sesión con una valoración abdominal y de suelo pélvico, comprobando la funcionalidad muscular, reflejos, sinergias, así como la posición visceral, ayudándonos de la ecografía.
3. Por último, se diseña un plan de tratamiento con el que se pretende conseguir los objetivos del paciente gracias a las indicaciones y supervisión del fisioterapeuta.

Así mismo desde la fisioterapia de suelo pélvico acompañamos a la mujer en su proceso de cambios durante el embarazo, tras la valoración se plantean los ejercicios óptimos para mantener la musculatura lo mejor posible, así como a la preparación tanto de la paciente como de sus estructuras para el parto.